miércoles, 28 de abril de 2010

Semana de teatro





Cartel de la obra que se representará el próximo 11 de Mayo a las 20:00h!




viernes, 23 de abril de 2010

miércoles, 21 de abril de 2010

Maratón de fotos.

























Alicia Talavera Júdez
Primer Premio

Voy a hacerte una oferta...



















Voy a hacerte una oferta que no podrás rechazar
                                               Gritarás
                                               Gemirás
                                               Llorarás
Dejarás a tras cada sonrisa hueca
(Descubrirás que son las palabras de aliento las que te hacen respirar.)

Destruirás toda armadura que te ate a la realidad.
Derribarás toda muralla que te impida soñar.
Romperás las cadenas que te opriman.
Moverás montañas que no te dejen ver lo de detrás.
                                               Te mirarás
                                               Te tocarás
                                               Te olerás
                                               Te sentirás
                                               Te levantarás
                                               Te curarás
                                               Te salvarás
                                               Te completarás

Llorarás y reirás por haber descubierto que al fin y al cabo vives, que no moriste, que sigues.
Quítate la máscara.
Te devolveré todo aquello que te falta.
Esta eres tú.

Fdo: La soledad.

                                                      
   María Diego Gordón
Tercer Premio









Cuando escuché esa frase salir de sus labios, rebobinó la cinta, llevaba toda la tarde viendo la misma escena, esa frase le había hipnotizado. Era una se esas tardes perdidas, en las que matas el tiempo tirado en la cama, envuelto en el humo de todos los cigarros que has fumado. De pronto vio la película de video en la estantería, esas letras blancas la llamaron la atención, y allí estaba, otra vez, levantándose a por ella, a paso lento.
Ésta era una de las muchas veces que había sucumbido al poder de la película, sí, se sabía los diálogos de memora, si cerraba los ojos sabría reconstruir fácilmente todas las escenas, tenía el storyboard en su cabeza, pero jamás se cansaba de verla. La cinta estaba rallada y cada vez tenía menos calidad de imagen, pero por suerte el momento de la frase se mantenía intacto.
Así que allí estaba, sentado en el sofá, con el cenicero a rebosar y las bolsas de patatas cubriendo toda la mesa. No estaba sentado de manera cómoda, estaba en tensión, con el cuerpo echado hacia delante y los ojos fuera de órbita, esperando escuchar:
“Voy a hacerte una oferta que no podrás rechazar”. STOP.

Paloma Sánchez
  
Segundo Premio 









Las paredes oscuras de la habitación denotaban un profundo sentimiento de tristeza y soledad. Entre el humo del tabaco y el olor a perfume caro de las mejores boutiques de París.
Adela comenzaba a escribir su primera novela: “Voy a hacerte una oferta que no podrás rechazar.” Ése era su título. Una historia de amor y sentimiento, pero también de dolor, un dolor intenso y coaccionado que había impregnado la juventud de Adela. Era su autobiografía.
Ella había decidido despojarse del odio hacia su padre y comenzar a contar su historia al mundo. “Para que otros aprendan”, era lo que solía contestar cuando la preguntaban el porqué de su decisión. Es un relato de autosuficiencia, de aprender a no depender de los demás hasta que te desgastan por dentro, para darte cuenta de cuándo están resquebrajando tu vida, para que busques soluciones y no te dejes engañar o influenciar. Ya no había podido contarle la historia de su vida su madre, Adela se abría  a los demás. “Ahora es el momento de salvarme yo y de intentar salvar a otro que sufren o que podrán sufrir como yo lo hice; para que se den cuenta de que cando algo o alguien te causa tanto dolor que llega a impedirle respirar, hay que salir corriendo pero sobretodo, para que cuando alguien te ofrezca algo doloroso y oscuro, por mucha dependencia y euforia que cause, te convenzas de que sí la puedes rechazar.”
Ésta era la introducción y el principio del camino.

Marta González Borraz.

Primer Premio


        








martes, 20 de abril de 2010

SEMANA DE FIESTAS!









Programa de fiestas:
Marina Tobaruela
Carmen Yuste

domingo, 4 de abril de 2010

Aniversario


La Gran Vía madrileña cumple 100 espléndidos años. Para celebrarlo, durante lo que queda de año habrá, desde exposiciones de fotografía, hasta ciclos de cine sobre las películas más populares estrenadas en cicha calle, pasando por conferencias o visitas guiadas y menús especiales en tabernas y restaurantes.


Para saber más:
http://www.esmadrid.com/es

sábado, 3 de abril de 2010

El Thyssen Bornemisza vs. El Cova (una lucha contra el tiempo).

                    


         Fugaz aventura de la tarde del viernes 5 de marzo: esta actividad fue la segunda de la ya famosa semana del “CovaArt” de nuestro vecino de arriba (el Cova y compañía hacen cosas guays, así que deberíamos pasarnos de vez en cuando a echar un ojo!).


Con ciertas inseguridades ante la perspectiva de ser única mujer, y ajena a su mayor, ante tanto hombre junto, me colé de intrusa con preaviso entre las filas covarrubias: quise aprovechar una visita a este museo tan famoso de los actuales Madriles (la colección Thyssen, la de nuestra Tita Cervera, que esa tarde, por suerte, no se hallaba encadenada a ningún árbol de la zona, prefirió tomar el té con sus amigas).

(Me acogieron muy bien por cierto, gracias desde aquí a aquellos covas. De hecho algunos confusos y crédulos me trataron, por alguna clase de chivatazo-traición, de cuasi-guía del museo. Gracias desde aquí por la consideración, pero me pusisteis en un apuro considerable).



El quid de la cuestión (y no es crítica a nuestro vecino, sino nuestros fallos individuales que a lo grande hacen que desaprovechemos oportunidades como esa, y otras!): Irresponsable y camicace fue, bajo mi humilde opinión, esta gran excursión desde el principio, aunque no menos divertida: salimos más tarde de lo previsto y, en el punto de pasar el control de tickets para comenzar la visita, contábamos con la increíble y alentadora cifra de una hora y media para ver ¡un museo completito!. Ni más más, ni más menos: hora y media (haya magos y hadas madrinas que hagan milagros en ese tiempo en un sitio de tamañas características, pero yo no los conozco, aún).

Muchos supieron hacer resumen de museo, otros no. Lo que es seguro es que: o algunos nos quedamos con hambre, o comimos tan rápido que no logramos distinguir si aquello sabía a pan ácimo de la pintura gótica del piso de arriba, o a coca cola de algún cuadro pop de la planta baja.




















Mujer en el baño. Roy Lichtenstein, 1963                                                                Arlequín con espejo. Pablo Ruíz Picasso. 1923




                 El museo Thyssen, y ya que nos ponemos pues... ¡lo comentamos!, es un buen sitio para ir, aunque sabemos que da reparo pagar con eso de que es privado (pero no es caro siendo estudiante). Así como información sobre él decir que es un buen complemento a la pintura de la colección del Prado, para los que hayáis ido ya. Contiene a veces pinturas de algunos períodos o lugares de los que adolece éste (tiene cerca de mil obras expuestas en las puedes ver los principales periodos y escuelas del arte occidental desde el siglo XIII: como el Gótico, Renacimiento, Manierismo, Barroco, Rococó, Romanticismo y el arte de los siglos XIX y XX hasta llegar incluso al Pop Art). Se incluyen también algunos movimientos que no existen en las colecciones estatales, como el Impresionismo (¿habéis ido ya a la exposición que os dije?...¬¬), el Fauvismo, el Expresionismo alemán y las Vanguardias experimentales de comienzos del siglo XX. Además te llama la atención ¡la de pintura yankee que hay! (del siglo XIX, que no está muy difundida por aquí y, de hecho, única en el ámbito de los museos en Europa).



Como digo, es un museillo muy variado, y para colmo, al no ser muy grande es más acogedor y ameno de ver (sí, hablamos de un museo). Por supuesto que es agradable y no extenso para quien va allí con tiempo (bueno, pero no os confiéis, porque ésta no es una norma que vale con todos los museillos, porque para nuestro gran gozo decirte que aunque vayas al Prado con tiempo, olvídate de cualquier modo humano de ver el museo de una sentada. Morirás en el intento, de sobredosis de pintura).




       Les Vessenots en Auvers, Van Gogh. 1890


Moraleja museística y aplicable a prácticamente cualquier cosa de la vida humana de un colegial:
si quieres ver un museo con tu colegio mayor más te vale salir un año y medio antes de casa, porque verás: reunir a todos en el hall (con la puntualidad y capacidad de organización que nos caracteriza), llegar hasta la parada del bus, esperar a que llegue, el trayecto por una ciudad con un tráfico tan tranquilo y desahogado como Madrid, la parsimonia al caminar (y si diluvia ,como fue el caso, mejor) y la espera para coger las entradas, serán los ingredientes mágicos, fabulosos, sensacionales y perfectos para que la actividad llamada “visita al museo Thyssen-Bornemisza” pase a llamarse “NO ver el museo Thyssen-Bornemisza", por mucho que vueles como Superman, y tengas la capacidad de percepción del Hombre Araña…

Vomitarás el museo nada más salir. Por comer sin masticar.





¡De los errores se aprende chicos!
 
 
  Inma Gimena García